Hoy, el día ha salido nublado y con bastante frío en Miranda de Ebro, lugar donde resido, y para entrar en calor, no hay nada como un buen plato de lo que aquí os presento.
El Cocido extremeño es uno de los
platos típicos en toda Extremadura. El ingrediente principal es el garbanzo, acompañado de
diversas carnes. Pudiéndose ser estas: gallina
o pollo, chorizo rojo, tocino, costilla y morcilla del cerdo.
La receta es tal cual lo hacía mi
madre, en un puchero de esos de color rojo oxidado; aunque se puede hacer
perfectamente en cualquier tipo de olla;
pero eso sí, no sabe igual que hecho poco a poco. En mi casa se comían los
garbanzos mezclados con sopas de pan que
eran caladas con el mismo caldo del cocido.
Ingredientes (para 5-6 personas):
- 2 tazas de garbanzos pedrosillanos.
- 400 g de morcillo de ternera.
- 2 muslos de pollo.
- 1 hueso de caña de ternera.
- 1 trozo de tocino fresco.
- 1 trozo de tocino añejo.
- 2 patatas.
- Un par de ramas de hierbabuena.
- 2 chorizos rojos, frescos.
- Sal.
Preparación:
El día anterior se ponen los garbanzos
en remojo con agua y un poco de sal.
Por la mañana, se lavan los garbanzos;
se introducen en el puchero todas las carnes y los huesos, excepto el
chorizo, se cubren con agua y se pone a cocer y cuando alcanza el punto de ebullición bajamos al mínimo y lo
dejamos cocer durante dos o tres horas, añadiendo de vez en cuando más agua, si es que esta se reduce en exceso. El chorizo se cuece aparte para que no tenga tanta grasa.
Después, cuando los
garbanzos están tiernos, apartar el caldo para calar las sopas de pan.
Servir los garbanzos, por un lado; las carnes por otro, y que cada uno se sirva lo que quiera.
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